Niños, jóvenes, adultos y hasta abuelitos disfrutaron al máximo la primera de las dos fechas de Imagine Dragons en el Estadio GNP Seguros, donde miles de voces se unieron para corear las canciones de una de las bandas favoritas del público mexicano.
Normalmente, cuando uno va a un concierto se puede intuir el público target del artista. Hay adolescentes para bandas asiáticas, algunos fans que crecieron con la música de los 80 o chavorrucos del boom del nuevo siglo. Pero lo curioso de Imagine Dragons es que logra cautivar a todas las edades.
Pude observar a padres cantando junto a sus hijos pequeños, grupos de adolescentes, personas que seguramente venían del trabajo y hasta algunas cabezas plateadas que rondaban los 50 o 60 años de vida.

Afortunadamente, la Ciudad de México nos dio tregua con el clima: sin lluvia, solo algunas gotitas esporádicas, aunque el tráfico estaba infernal, sobre todo con Rels B presentándose casi al mismo tiempo en el Palacio de los Deportes.
Con una bella luna iluminando el Estadio GNP, abarrotado en todas las entradas, a las 21:30 horas comenzó el show de Dan Reynolds y compañía. Imagine Dragons no necesita empezar de menos a más: desde la primera canción, la energía fue máxima. Abrieron con “Fire in these hills” y continuaron con “Thunder”, uno de sus mayores éxitos.
Le siguieron la pegajosa “Bones” y “Take Me to the Beach”, momento en el que decenas de pelotas de playa gigantes invadieron el escenario y la pista, mientras Dan recorría el lugar sin playera, arengando a los presentes. “Shots”, “I’m so sorry” y “Whatever It Takes” mantuvieron al público totalmente entregado, en la sinergia característica de la banda cada que toca en México.

Entre canción y canción, un emocionado Dan reafirmó su amor por el país, asegurando que le gusta nuestra cultura, nuestra gente y que adora la comida mexicana, incluso se animó a cantar “Cielito Lindo”.
El set acústico incluyó “Waves”, un cachito de “It’s Time” y “I Bet My Life”, antes de retomar la energía con “Bad Liar”, “Nice to Meet You” y “Wake Up”. Las primeras notas de “Radioactive” desataron la energía contenida de la gente y “Demons” provocó más de una lagrimita entre los asistentes.
El espectáculo siguió con “Natural”, “Walking the Wire”, “Sharks” y “Enemy”, hit tras hit, sin descanso. Cerraron con “Eyes Closed”, “In Your Corner” y “Don’t Forget Me”, antes de rematar con la impresionante “Believer”, tema elegido para cerrar el Loom World Tour, que lleva más de un año alrededor del mundo.
Imagine Dragons nunca decepciona, y esta ocasión no fue la excepción, dejando a los fans mexicanos con una noche inolvidable.
